El rechazo al Presupuesto 2025 de la intendenta Romina Rosas generó tensiones políticas en Caucete
Política27/12/2024Diario UrbanoLa presentación del Presupuesto 2025 de la intendenta de Caucete, Romina Rosas, sufrió un revés inesperado ayer cuando el Concejo Deliberante rechazó la propuesta presentada por el Ejecutivo.
La negativa fue impulsada por una alianza entre dos ediles del orreguismo y dos del peronismo, quienes se impusieron sobre los tres concejales del oficialismo. De este modo, Rosas se verá obligada a gestionar con el presupuesto de este año, lo que abre un nuevo frente de conflictos, particularmente sobre la reforma de partidas.
Uno de los puntos más polémicos del rechazo fue la diferencia en la interpretación de las facultades del Ejecutivo para reestructurar las partidas presupuestarias. El concejal Emanuel Castro, quien impulsó la objeción, señaló que cualquier readecuación de partidas debe contar con la autorización del Concejo, basándose en una modificación reciente de la ordenanza 2200. Según esta normativa, cualquier ajuste en la asignación de recursos debe ser aprobado por el Legislativo, incluso si no altera el monto final del presupuesto. En cambio, la intendenta Rosas defendió que el Ejecutivo tiene la facultad de realizar estos cambios siempre que no afecten el equilibrio entre los ingresos y egresos, y que solo debe informar al Concejo sobre las modificaciones.
La jefa comunal no dudó en expresar su descontento, calificando de “lamentable” la actitud de los ediles opositores y acusándolos de “no querer trabajar”. Además, criticó el rechazo al presupuesto como una medida puramente política, señalando que la negativa pone en riesgo las obras que estaban planificadas para 2025, afectando directamente a los habitantes de Caucete. También mencionó que uno de los factores que motivaron el rechazo fue la propuesta de reducir las remuneraciones de los concejales, lo que, según Rosas, les afectó de manera directa.
En cuanto a las críticas sobre el contenido del presupuesto, Castro cuestionó que no se vean reflejadas las promesas de contención del gasto, destacando el aumento en la partida para el Plan de Inclusión Laboral Departamental (PILD) y el incremento de personal contratado. Aseguró que estas medidas evidencian una intención de aumentar el gasto público y corriente, lo que va en contra de las promesas de austeridad.
Rosas, por su parte, defendió la necesidad de aumentar los recursos destinados a los trabajadores del PILD, explicando que se trataba de una actualización acorde con el contexto económico, mientras que la ampliación de los contratos responde a un proceso gradual para mejorar las condiciones laborales. En cuanto a las remuneraciones de los concejales y secretarios, aclaró que, aunque no se redujo la planta política, sí se aplicó una disminución en el porcentaje que perciben en relación al salario de la intendenta, lo que no fue bien recibido por los ediles.
El rechazo al presupuesto, que se presentó "sobre tablas" en una sesión que comenzó a las 11 de la mañana, también fue criticado por la intendenta, quien recordó que, durante su tiempo como concejal, el Legislativo estaba dispuesto a extender sus sesiones hasta conseguir acuerdos, lo que no ocurrió en esta ocasión. "El problema es que estos muchachos no quieren trabajar", sentenció Rosas.