En San Juan se registró un aumento de casos de trastornos alimentarios

En este escenario, en 2025 continuarán trabajando en los lineamientos de acompañamiento y pondrán el foco en el rol de los padres como pilares fundamentales en el seguimiento de los casos.
 

 
En 2024, se registró un aumento en las consultas relacionadas con trastornos alimenticios, especialmente entre los adolescentes, que siguen siendo la población más afectada. Así lo confirmó Bernarda Páez, referente en el tema y parte del equipo del Hospital Guillermo Rawson. La especialista explicó que, en general, la consulta suele aumentar desde el mes de septiembre en adelante, coincidiendo con el cambio de ropa y la proximidad del verano, lo que genera una mayor preocupación por la apariencia física.

En este escenario, en 2025 continuarán trabajando en los lineamientos de acompañamiento y pondrán el foco en el rol de los padres como pilares fundamentales en el seguimiento de los casos.

“Siempre tenemos un aumento en septiembre. La llegada del verano y el cambio de ropa provocan que este tipo de trastornos se hagan más evidentes, especialmente en los adolescentes, que son nuestra mayor población”, detalló Páez. 

El servicio de atención se realiza todos los días, con un día clave de admisión: los martes, cuando se realiza la primera entrevista con los pacientes y se les asigna el tratamiento adecuado. En esos días, el equipo atiende entre 4 y 6 pacientes, pero también se realizan controles diarios.

Es importante destacar que los profesional realizan una evaluación del paciente. Durante este proceso, determinan los pasos a seguir, según la gravedad de la situación. Dependiendo del diagnóstico preliminar, se toman los lineamientos a seguir.

Hasta el mes de diciembre, se registraron 10 pacientes internados, y Páez destacó que están a la espera de poder contar con un espacio más grande para atender la creciente demanda.

El rango de edad se concentra principalmente en los adolescentes, aunque también se observan casos en niños de 11 o 12 años y pacientes con trastornos de larga data. Los casos de internación crítica aumentaron desde septiembre, especialmente en pacientes que llegan en estado de desnutrición grave.

Factores
Páez señaló que uno de los factores clave en el aumento de trastornos alimenticios es el contexto emocional y familiar de los pacientes. “Muchos adolescentes enfrentan problemas como el bullying y dificultades para definir su identidad, lo que afecta directamente su autoestima y aumenta el riesgo de trastornos alimenticios. Es importante destacar que estos trastornos no son solo una cuestión alimentaria, sino profundamente psicológica", detalló la profesional. La falta de una buena relación familiar también impacta en la salud emocional de los jóvenes.

Tratamiento y evolución
En cuanto al tratamiento, el equipo de trabajo del Hospital Rawson sigue un protocolo de “media alta”, que permite a los pacientes seguir el tratamiento en casa. “El tiempo estimado de tratamiento es de un año y medio a dos años, dependiendo de la evolución de cada paciente”, aseguró Páez.

El hospital ofrece talleres de nutrición, actividades terapéuticas y acompañamiento psicológico, con el objetivo de garantizar la recuperación integral del paciente. Además, se realiza un seguimiento con reuniones periódicas con los padres, quienes son fundamentales en el proceso terapéutico.

Educación y acompañamiento escolar
En cuanto a la educación, los pacientes pueden seguir cursando sus materias y comunicarse con sus escuelas a través de correos electrónicos. Si bien en algunos casos el trastorno alimenticio afecta la capacidad de concentración, el tratamiento se prioriza para asegurar la recuperación emocional y física de los pacientes.

Equipo de trabajo
El tratamiento es llevado a cabo por un equipo multidisciplinario que incluye nutricionistas, enfermeras, psicólogos, psiquiatras, profesores de educación física y acompañantes terapéuticos, quienes trabajan de manera coordinada para ofrecer un enfoque integral que aborde tanto los aspectos físicos como emocionales del trastorno alimentario.

El dato
El equipo también registró casos de psicosis y alteraciones psiquiátricas que, en ocasiones, se confunden con trastornos alimenticios. “Para diagnosticar un trastorno alimenticio, debe haber una distorsión de la imagen corporal, algo que en muchos casos no se da en los pacientes con psicosis”, precisó la especialista.

En resumen, el aumento de trastornos alimenticios en  San Juan refleja una compleja realidad emocional y social entre los adolescentes. El equipo del Hospital Rawson sigue trabajando con el objetivo de ofrecer un tratamiento integral.