Amenaza de bomba en el Centro Cívico: uno de los acusados fue condenado y deberá pagar $4 millones al Estado

Carlos Cabaña, uno de los dos acusados por la falsa amenaza de bomba contra el Centro Cívico de San Juan, fue condenado a dos años de prisión condicional y deberá pagar $4.000.000 al Estado provincial en concepto de resarcimiento por los costos del operativo de seguridad desplegado durante la emergencia.

El hecho ocurrió el pasado 16 de septiembre, cuando un llamado anónimo al 911 alertó sobre la supuesta presencia de un explosivo en el edificio público. Inmediatamente, se activó el protocolo correspondiente y se evacuaron cientos de personas, generando un fuerte despliegue de fuerzas de seguridad.

La investigación fue llevada adelante por la UFI Genérica, a cargo de los fiscales Ignacio Achem y Belén Sánchez, quienes lograron determinar que la llamada fue realizada en tono de broma, en pleno horario laboral, desde el teléfono celular de Hugo Castro. Sin embargo, fue Cabaña quien tomó el dispositivo de su compañero y efectuó la comunicación.

Durante la llamada, según consta en la causa, se escuchan risas de fondo antes de que se emitiera la falsa advertencia sobre la supuesta bomba. Ambos hombres fueron detenidos el fin de semana siguiente y permanecieron más de 72 horas aprehendidos.

El juez Diego Sanz homologó el acuerdo de juicio abreviado, en el que Cabaña aceptó su responsabilidad y recibió una condena de dos años de prisión condicional.

Además, se comprometió a abonar la suma de $4.000.000 en 30 cuotas mensuales de $133.333,33 durante un plazo de dos años y medio. La Fiscalía de Estado, que se constituyó como querellante en el proceso, anunció que no continuará con acciones civiles debido a que el acusado aceptó el resarcimiento económico.

El segundo involucrado, Hugo Castro, dueño del teléfono utilizado, no fue señalado como autor de la llamada y por el momento no recibió una condena.