
El gobierno de Donald Trump revocó la certificación federal que permitía a Harvard recibir estudiantes internacionales. La medida afecta a más de 6.800 jóvenes y fue justificada por presuntas violaciones de seguridad en el campus.
La administración de Donald Trumpcanceló el permiso que habilitaba a la Universidad de Harvard a matricular estudiantes extranjeros. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) alegó que la institución promovió un ambiente inseguro en el campus y acusó a su dirigencia de permitir agresiones contra alumnos judíos y colaborar con el Partido Comunista Chino.
"Esto significa que Harvard ya no puede matricular a estudiantes extranjeros y que los estudiantes extranjeros actuales deben transferirse o perderán su estatus legal", sostuvo el DHS en un comunicado citado por Deutsche Welle. Según la medida, ningún estudiante con visas F o J podrá inscribirse en el ciclo académico 2025–2026.
La decisión fue anunciada por la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, quien escribió en la red social X: " Harvard tuvo muchas oportunidades de hacer lo correcto. Se negó. Han perdido su certificación del Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio como resultado de su incumplimiento de la ley. Que esto sirva de advertencia a todas las universidades e instituciones académicas del país".
El DHS había enviado una carta a Harvard en abril para exigir registros sobre la actividad de los estudiantes internacionales, incluidas protestas en el campus. Según The Harvard Crimson, la universidad respondió parcialmente, entregando algunos antecedentes disciplinarios, pero sin cumplir con la totalidad de los requerimientos. El gobierno consideró la respuesta insuficiente.
Actualmente, Harvard aloja a cerca de 6.800 estudiantes extranjeros, lo que representa el 27 % de su matrícula total. La mayoría cursa estudios de posgrado y proviene de más de 100 países.
En su comunicado oficial, la universidad calificó la medida como "ilegal" y aseguró que trabaja "rápidamente para brindar orientación y apoyo a los miembros de nuestra comunidad". El vocero institucional agregó: "Esta acción retaliatoria amenaza con causar un grave daño a la comunidad de Harvard y al país, y socava la misión académica y de investigación de la universidad".
En abril, el presidente de Harvard, Alan Garber, se había dirigido a la secretaria de Educación, Linda McMahon, para reafirmar que "los estudiantes internacionales son miembros vitales de nuestra comunidad" y que "no hay evidencia de que estén más propensos a incurrir en violencia o mala conducta que cualquier otro estudiante".
Noem declaró en Fox News que la revocación "debe ser una advertencia para todas las universidades" y sostuvo que su departamento perseguirá "el cumplimiento de la ley para erradicar el antisemitismo y el antiamericanismo en los campus".
La medida forma parte de una ofensiva más amplia del gobierno de Trump contra Harvard. En los últimos meses, la Casa Blanca suspendió más de 2.650 millones de dólares en financiamiento federal, exigió eliminar programas de diversidad e inclusión y reclamó la entrega de información detallada sobre admisiones y protestas estudiantiles. En mayo, se sumó la cancelación de otros 450 millones en subvenciones.
La universidad, que posee un fondo de dotación superior a los 53 mil millones de dólares, respondió a estos recortes con una demanda judicial contra la administración. Garber afirmó: "La universidad no se rendirá ni renunciará a sus derechos constitucionales (…) La prescripción del gobierno excede su poder. Viola la Primera Enmienda y sobrepasa los límites legales establecidos por el Título VI".
El DHS advirtió que para recuperar su certificación, Harvard deberá entregar en un plazo de 72 horas todos los registros sobre conductas "ilegales", "violentas" o "peligrosas" de estudiantes internacionales en los últimos cinco años, además de grabaciones de protestas y antecedentes disciplinarios vinculados.
"Que ellos presenten una demanda, si quieren", respondió Noem ante la posibilidad de un nuevo litigio. "Estamos preparados".





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